Sainte Chapelle, estandarte de belleza en el Gótico.

Desde Charlarte, queremos hablarles de una de las obras más bellas de la arquitectura gótica. Se trata de la Sainte Chapelle, la cual está situada en París. Esta obra, fue proyectada como relicario del rey San Luis de Francia. Destaca en esta edificación, los inexistentes muros y la cantidad de vanos plenos de vidrieras policromadas. Esta, fue consagrada en 1248 para albergar reliquias como, la corona de espinas y la lanza de Longinos entre otras. Piere de Montreuil la realizó entre los años 1242 y 1248 y fue localizada en la Isla de la Cité de la ciudad parisina.

Saint Chapelle, París, 1242-1248

Las columnas de la techumbre soportan toda la estructura, sirviendo de marco de un plano de Salón. Las columnas tan finas, hacen parecer que las vidrieras floten. Estas vidrieras representan escenas religiosas y a algunos personajes destacados. Concretamente podemos encontrar escenas del Génesis o el Éxodo entre otras temáticas. Además de las escenas relatadas en las vidrieras, podemos encontrar algunas obras escultóricas de algunas santidades en sus laterales

Después de situar y detallar algunos aspectos importantes de esta maravillosa capilla, nos centraremos en  los aspectos artísticos de esta. El azul de esta capilla, es un azul bellísimo. Así mismo, este azul aparece en la mayoría de los lugares de la capilla. Concretamente, es utilizado un azul marino, que nos sirve y hace la labor de cielo en el que brillar. Precisamente hay varios elementos que contrastan y nos sitúan con su brillo en un plano celeste. Principalmente la techumbre, la cual porta un mar de estrellas, las cuales se muestran ordenadas creando una sensación uniforme. Son estrellas de color dorado y realizadas de una forma muy detallista.

Detalle mar de estrellas, Sainte Chapelle, París, 1242-1248

Si su techumbre impresiona al verla, sus vidrieras tienen una calidad y belleza de mayor incidencia en el espectador. Son vidrieras grandiosas, las cuales muestran marcos geométricos de identidad propia, creando en ellos un diseño único. Nos centraremos en una de ellas en la que entender uno de los diseños de la Sainte Chapelle. A la derecha de la capilla, encontramos una de ellas, la cual porta un diseño de formas circulares, en las que se desarrollan las distintas escenas. Estos marcos circulares, se enlazan entre ellos, creando una sensación y un diseño maravilloso. Estos enlazamientos, crean formas reconocibles de 5 círculos, con uno central de mayor tamaño, el cual no porta ninguna escena. Simplemente es un nexo de unión entre ellas.

Detalle de diseño de la vidriera, Sainte Chapelle, París, 1242-1248

A la misma vez que sucede en el cielo, en el cual se crea una especie de mar de estrellas. Aquí las escenas muestran ese mismo sentido, queriendo crear los artistas dedicados a su construcción, una especie de visión única como hacían los impresionistas. La Santa Capilla, crea una visión única gracias a este mar de vidrieras.

Detalle de perspectiva de la vidriera, Sainte Chapelle, París, 1242-1248

Es magnífica la visión de la misma. Esta cuestión se ve acuciada y rematada con los muros laterales, los cuales muestran arcos apuntados en los que se muestran arcos lobulados. Estos están repintados con otro azul conjuntado y contrastado con la flor de lis, realizada en color dorado y representada como símbolo de la realeza francesa.

Arco lobulado y flor de lis, Sainte Chapelle, París, 1242-1248

Como sucede en la techumbre, se muestra el color dorado como color contrastante, el cual se extrapola a los pocos muros que se atisban. Estos, están pintados de color dorado, hecho que sirve para no perder la consonancia y conjunción de colores. Esta conjunción de colores azules y dorados, se ve también intercalada con otros colores, los cuales no se muestran con tanta intensidad como el azul. Es el caso de los colores rojos, amarillos, blancos y verdes. En estos, se detallan elementos como las vestimentas de algunos personajes y otros elementos que ilustran las vidrieras.

Detalles dorados, Saint Chapelle, París, 1242-1248

Queda claro tras analizar tanto las intenciones constructivas de la Santa Capilla, como el resultado final de su construcción, que esta edificación representa el espíritu y la idiosincrasia de la arquitectura gótica. Esta pretendía ser un mar de luz con el que impresionar al creyente, ya que tras el Románico, estilo el cual por los avances tecnológicos y una visión del cristianismo más sobria, la luz brillaba por su ausencia, cuestión que no quiere decir que en el Románico no se construyeran edificaciones de gran belleza. Pero el Gótico, da un paso más allá en cuanto a elementos constructivos y el conectar con el creyente, más que acongojarlo lo impresiona. Cada etapa tiene su contexto y la Sainte Chapelle es una obra cumbre del gótico y de obligado estudio.

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