Hoy os queremos hablar de la obra Ofelia de John Everest Millais. Esta obra realizada entre los años 1851 y 1852, retrata una de las Escenas de una de las obras más famosas del literato inglés William Shakespeare. En su obra Hamlet se retrata una premonición de la Reina Gertrudis, la cual narra la muerte de Ofelia hija del chambelán Polonio. Cuenta la Escena VII que según la reina, Ofelia moriría recogiendo flores. Buscando la belleza de la flor, cayó al agua tras romperse una rama y acabó muriendo de ahogamiento.
Millais retrata la imagen más trágica y a su vez con más belleza posible. Retrata a Ofelia tendida sobre el agua, sin saber si ya ha fallecido o se está ahogando. Aunque esto no es lo más destacable. Esta obra es todo belleza, está rodeada de naturaleza y de detalles de gran preciosismo. Esta escena está inspirada en el Río Hogsmill, localización descubierta en unas confesiones del pintor franco-inglés a su amigo Holmant Hunt.
Antes de hablar de aspectos pictóricos, existen detalles de gran simbología en esta obra. Ofelia lleva un collar de violetas simbolizando una muerte joven. Así mismo, se retrata un mar de flores el cual representa el amor vacuo. Por otro lado, aparece un sauce como símbolo de un amor desamparado. Por último, la ortiga que representaría la pena y las margaritas la inocencia. Todo esto auspiciado y descrito por William Shakespeare.
Centrándonos en cuestiones pictóricas es una obra magnífica. Esta porta muchísimos detalles. En relación a Ofelia, el rostro está lleno de realismo. Sus ojos se muestran brillantes y exhaustos del ahogamiento. Su boca abierta expirando el poco aire que le quedaba. Es un rostro lleno de tragedia. Su rostro se apoya en su propio pelo, el cual baña todo su alrededor, tiñendo de cobrizo las cercanías de su cabeza.
Ofelia aparece con sus brazos abiertos y asomando sus manos. Estas son retratadas de una manera magnifica. La textura que muestra la mano y la prolongación del brazo son retratadas de manera muy realista, ya que la mano se ve totalmente nítida pero su antebrazo se diluye y trasparenta en el agua, retratando este fenómeno de manera perfecta. Incluso podemos ver como rompe el agua con un reflejo muy característico.
Su mano derecha muestra las flores que estuvo recogiendo hasta el fatal accidente. Así mismo, se muestra como algunas flores se han desprendido de su mano y siguen el curso del río.
Su vestido es retratado destacando los brillos de las incrustaciones que porta, formando una especie de nebulosa blanca que flota en el río. La parte inferior del vestido, parece como si se hubiera mimetizado con la naturaleza y se convirtiera en un nenúfar blanco.
En relación a la naturaleza, decir que es una obra llena de detalles florales y vegetales. Destacan entre todas las plantaciones la flor de la margarita. Como decíamos anteriormente la margarita simboliza la inocencia. Y este cuadro está lleno de inocencia. Ofelia no hizo nada, ni mereció encontrar su muerte. Por esta cuestión, la margarita es la flor que mejor representa su historia. Millais las representa de una manera fehaciente, ya que cada unda de las flores es independiente. Tienen una forma y una orientación distinta, compartiendo el color característico de pétalos y pistilo.
Millais representa un ecosistema, que es un magnífico retrato de todas las plantaciones típicas de los ríos. Pictóricamente, destaca la forma en la que retrata los juncos en primer plano. Es una obra en la que perderse, ya que tiene infinitos detalles. Podemos destacar algunos de ellos. Podemos apreciar como un petirrojo aparece en uno de los ramajes y este aparece cantando.
Otro detalle importante, es como Millais añade una especie de calavera que representa el alma de Ofelia, la cual aparece desprendiéndose de su cuerpo. Esta aparece en la parte izquierda del cuadro en su parte central. Se puede apreciar retratada en una neblina blanca.
Por último, queríamos destacar la única salida de la escena que tiene esta obra. Aporta un punto de perspectiva en la parte superior en su zona central. Atisbamos como aparece un cielo nublado y algunas plantaciones a lo lejos.
En definitiva, es una obra de tantos detalles, que merecería un estudio extenso. Es una obra en la que perderse. Una escena llena de belleza para una despedida inesperada e injusta.